Para mantener tus zapatos en perfecto estado:

• Guardalos en su caja o bolsa, en un lugar ventilado y seco.
• Evitá el contacto con agua, perfumes o productos químicos.
• Si se mojan, secalos con paño suave sin frotar y déjalos secar a temperatura ambiente.
• No los laves en lavarropas.

Limpieza según material:

• Tejidos/textiles: cepillo suave + paño apenas húmedo.
• Cuero graneado: limpiar con paño húmedo y luego pulir con pomada incolora.
• Nobuk: cepillo para gamuza, solo en seco.
• Cueros metalizados: paño seco y suave.

Recordá que las marcas y vetas son propias del cuero natural y parte de su carácter único.

Para conservar tus accesorios de cuero por más tiempo:

• Guardalos en su bolsa de tela, en lugar seco y lejos del sol directo.
• Evitá el contacto con humedad, agua, aceites, cremas y productos abrasivos.
• No los expongas por períodos prolongados a la luz o al calor.
• En caso de manchas, recurrí a una tintorería especializada en cuero.

Para que tus piezas brillen por más tiempo:

• Guardalas por separado, en su bolsa, lejos de la humedad.
• No apliques perfumes o cremas directamente sobre ellas.
• Para limpiarlas, usá un paño de algodón o fieltro con suavidad.

Tejidos de punto

• Lavar a mano con agua fría.
• Secar en plano. No frotar ni retorcer.

Jeans

• Lavar y secar del revés.
• Los tonos oscuros pueden desteñir: lavar por separado las primeras veces.

Sedas, cupro y delicados

• Lavar a mano. Planchar con paño y calor suave.
• No exponer al sol directo ni frotar con cepillos o trapos.

Cuero sintético

• Limpiar con paño húmedo o en seco.
• Evitar el calor y el sol directo por tiempos prolongados.

Prendas de cuero natural

• Siempre limpieza profesional.
• Guardar protegidas y sin humedad.